miércoles, 23 de diciembre de 2009


Mujeres...siempre igual.

Mujeres perfectas, retorcidas, mujeres que abren la boca al pintarse los ojos.

Mujeres fuertes, inamovibles, de frente...y empañadas en un mar de dudas empañadas con lágrimas en lo más recóndito de su habitación.

Mujeres que hablan (sin descanso) y descuartizan.

Mujeres que buscan y no encuentran. Que encuentran y no saben valorar.

Mujeres, siempre altivas, orgullosas, y pedantes, sonrientes e inocentes, siempre ante un espejo de sí mismas.

Mujeres con la sangre envenenada y fuego en sus pupilas, o bien transparentes y taimadas.

Mujeres buscando utopías, hombres perfectos, excusas, explicaciones...sintiendo celos, sintiendo dolor, y en el próximo instante, sintiendo alegría desenfrenada, locura transitoria... Siempre mujeres.

De una caricia a un mordisco hay un segundo. Y de una mujer al mundo real hay un abismo (de dudas).




(dedicado a Todas Aquellas.....simplemente)

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